Este 30 de octubre, Diego Armando Maradona hubiese cumplido 61 años. Seguramente estaría festejando como solo él sabía hacerlo. Pero hoy, millones de personas alrededor de todo el mundo lo saludan a través de las redes y lo recuerdan, a 11 meses de su fallecimiento.
Es recordado incluso por Claudia Villafañe, su exesposa y madre de dos de sus hijas. Ella supo ponerse a la altura de las circunstancias cuando Diego no tuvo sus mejores momentos.
La mamá de Dalma y Gianinna publicó un emotivo mensaje en su cuenta de Instagram recordando a Maradona.
“La mujer de mi vida”
Diego vio por primera vez a Claudia a los 17 años. Y los testigos del encuentro aseguran que el flechazo de Cupido fue inmediato. Ella, deslumbrada por este entusiasta futbolista con más ilusiones que pesos en el bolsillo, decidió dejar todos sus proyectos de lado para acompañarlo.
Claudia caminó junto a Diego durante muchos años aplaudiendo logros, padeciendo errores, perdonándolo en repetidas ocasiones: una de las más recordadas fue cuando, mientras estaba embarazada de Dalma, se enteró por televisión que Maradona se había convertido en padre de Diego Junior, junto a la italiana Cristiana Sinagra.
Pero Diego negó esa paternidad. Y, aunque la Justicia lo obligó a darle su apellido al niño, él lo siguió negando durante más de treinta años. Se lo negó a su esposa, a sus hijas y a su propio hijo. Y Claudia le creyó. Dos años más tarde llegó la segunda hija: Gianinna.
Ya en noviembre de 1989, la pareja celebró su boda a lo grande con una imponente fiesta en el Estadio Luna Park junto a invitados de lujo.
Siete años más tarde, Claudia se enteró de la llegada de Jana, la cuarta hija de Maradona, quien nació como fruto de la relación del jugador con Valeria Sabalain, una joven a quien había conocido en un restaurante en el que ella trabajaba como mesera.
En este caso Diego también negó su paternidad. Pero, una vez más, la Justicia se encargó de darle el apellido a la niña, a la que él recién aceptó después de dieciocho años.
Claudia nuevamente lo perdonó y se conformaba con que él volviera a la casa. Hasta que un día, ya no volvió. Según contó Villafañe, en el pedido de divorcio que presentó formalmente en 2003, Diego había hecho "abandono de hogar" desde julio de 1998.
Pero, por aquel entonces, Diego estaba en Cuba, adonde había ido a realizar un tratamiento de recuperación por sus adicciones. Allí conoció a otras mujeres con las que se involucró sentimentalmente.
Empezar de nuevo
Una vez divorciados, Diego conoció a Verónica Ojeda y comenzó con ella una relación formal. La pareja se mantuvo hasta el 2012, cuando ella anunció su embarazo de Dieguito Fernando. Diego decidió blanquear su romance con Rocío Oliva.
Por su parte, Claudia decidió comenzar desde cero una nueva vida lejos de las infidelidades de su exesposo. Comenzó una relación con el empresario Jorge Taiana en el año 2003, cuando producía la obra Pijamas en la que él trabajaba como actor de reparto.
Esta relación se mantuvo en el más absoluto silencio, ya que nunca se mostró en público con él. Es que ella sabía que esta era la única manera de seguir teniendo un trato ameno con su ex.
Sin embargo, se publicó una foto en la que se veía a Taiana pescando con Benjamín, el hijo de Gianinna, nieto de Diego y Claudia, junto al muelle de su casa. Y Maradona estalló de ira. "Cuando vi la foto sentí un puñal en el alma", dijo el futbolista.
Amor eterno
"El pibe de oro", una vez retirado de su carrera como futbolista, se dio el lujo de conducir su propio programa de televisión, producido por Claudia Villafañe, quien fue esposa, madre de sus hijas mayores y el amor de la vida de Diego Armando. En una edición de "La noche del 10", Maradona se entrevistó a sí mismo y dijo que cuando se muriera le gustaría que Claudia le dijera: "Aunque estés muerto, te sigo amando".