Las plantas aromáticas deben su delicioso aroma a los “aceites esenciales” presentes en sus hojas, tallos, raíces y flores. No solo perfuman tu hogar, también puedes usarlas para condimentar tus comidas, preparar tés, esencias, cremas y ungüentos.
Además, el cultivo de plantas aromáticas ofrece múltiples beneficios para la huerta agroecológica: contribuyen a la biodiversidad, equilibran verduras y flores, y son un antídoto natural contra plagas y enfermedades.
Métodos para multiplicar plantas aromáticas
Para empezar, elige el mejor ejemplar de tus plantas, aquellos que destacan por el tamaño de sus hojas, fragancia y resistencia. Existen diversas técnicas de reproducción para multiplicar tus plantas aromáticas:
Siembra de semillas
El perejil, el hinojo, el cilantro, la albahaca y la menta se pueden multiplicar a través de semillas. Es una forma sencilla y efectiva de aumentar la cantidad de estas especies en tu huerta.
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División de matas
El orégano, el estragón y el ajenjo se reproducen dividiendo las matas. Se obtienen plantitas a partir de una planta madre, separándola en trozos con raíz, tallos y hojas. Este método es ideal para plantas que han crecido demasiado y necesitan espacio.
Estacas y esquejes
Para reproducir el ajenjo, la albahaca, el estragón, la lavanda, el orégano y la salvia, corta gajos o esquejes de brotes nuevos y tiernos, eliminando las hojas de la base. Para plantas como la lavanda y el romero, es mejor realizar la multiplicación en otoño o primavera usando tallos semileñosos.
Estolones y rizomas
La menta, el estragón y el poleo se pueden multiplicar a través de estolones, que son tallos que crecen bajo la superficie y forman raíces en cada punto de contacto con el suelo. El azafrán y el jengibre se reproducen a través de rizomas o bulbos, cortando trozos del rizoma madre y colocándolos en macetas para que desarrollen nuevas plantas.
Con estas técnicas, puedes convertir cualquier balcón, jardín o maceta en una huerta llena de plantas aromáticas que aportarán soluciones saludables y agradables a tu día a día. ¡Manos a la obra y disfruta de tu jardín aromático!