Los cactus se han convertido en las estrellas de la decoración gracias a su fácil mantenimiento, precio accesible y la increíble variedad de formas y tamaños. Son la elección perfecta para adornar tanto el patio como el interior del hogar, y lo mejor es que sus cuidados son mínimos.
Conocidos por su capacidad para almacenar agua, los cactus guardan este preciado líquido en sus hojas, tallos o raíces, en cantidades mayores que otras plantas. Esta habilidad les permite sobrevivir en climas áridos y con temperaturas elevadas. Sin embargo, ¡hay que saber cómo hidratarlos para evitar problemas!
La regla de oro es regarlos una vez a la semana o solo cuando la tierra esté seca, ya que el exceso de agua puede dañarlos. Por eso, ¡te compartimos un truco súper sencillo para regarlos solo cada quince días o incluso una vez al mes!
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Un truco muy sencillo
Consigue un balde de al menos 15 centímetros de profundidad y llénalo hasta la mitad con agua.
Coloca tus cactus miniatura en el recipiente y déjalos sumergidos durante unos 20 minutos.
Sácalos del agua y escúrrelos bien hasta que dejen de gotear.
Así, tus cactus estarán perfectamente hidratados y podrán pasar un largo periodo sin necesidad de riego. ¡Es magia pura!