Una de las particularidades que tienen las flores diminutas, es que son capaces de generar más cantidad de pimpollo y así ser alimento para muchos insectos necesarios en tu jardín. Hay cinco tipos que son ideales para adornar tu casa.
Cada una de las estas flores diminutas tienen sus características, pero cumplen las mismas funciones, embellecer tus ambientes con un toque de naturaleza. A continuación, te presentaremos estas especies que las podés incluir en tu hogar.
Gypsophila
Este género comprende alrededor de 335 especies originarias de Europa, Asia y norte de África. Entre las más conocidas se destaca la Paniculata. Se tratan de flores diminutas de color blanco (también puedes encontrarlas en color rosa, naranja, amarillo, rojo y violeta).
Si bien sus tallos son finos, además son muy resistentes. Esta planta crece mejor en suelos más secos y alcalinos. Son especies que les agrada el sol directo.
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Miosotis
Es una planta herbácea de la familia de las Borraginaceas, con tallos casi tendidos, angulares, con espinitas revueltas hacía abajo, hojas ásperas, estrechas por la base y aovadas por la parte opuesta, y flores aules, llamadas nomeolvides. Sus flores son de color azul con amarillo en su centro, esto la hace única.
Erinus alpinus
Es mejor conocida como Siempre niña. Se destaca por sus pétalos pequeños de color rosa, blanco o violeta, y tallos de color verde oscuro. A esta planta le agrada la sombra parcial y los suelos con un PH mayor de 6, con muy pocas cantidades de nitrógeno.
Lobelia erinus
Está compuesta por unas 400 especies de flores que se distribuyen principalmente entre las zonas tropicales y templadas del mundo. Posee una forma de las hojas alterna y va variando entre oblongas, aovadas y espatuladas. Sus flores son de color azul y florecen con el calor de la primavera.
Arabis
Se luce a mediados y finales de la primavera. Se trata de flores diminutas rosa, violetas o azules. Tras su floración, esta especie se debe recortar para mantener forma compacta. Las condiciones adecuadas para su crecimiento son: sol pleno y suelo árido y bien regado.