Viernes 24 de Octubre 2025
DEPORTES

Racing cayó 1-0 ante Flamengo en el Maracaná, pero sueña con revertir la serie en Avellaneda: el Cilindro será una caldera y el equipo de Costas confía en su fortaleza como local

La Academia perdió por la mínima en Brasil con un gol en contra de Marcos Rojo, pero mantiene intacta la ilusión de alcanzar la final de la Copa Libertadores. El partido de vuelta será el miércoles 29 en el Cilindro, donde se espera un recibimiento histórico y un estadio repleto.

(Fuente: Conmebol)
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La derrota fue ajustada, pero la esperanza sigue viva. Racing Club cayó 1-0 ante Flamengo en el partido de ida de las semifinales de la Copa Libertadores 2025, disputado en el Maracaná. El único gol llegó a los 43 minutos del segundo tiempo, en una desafortunada acción en la que Marcos Rojo desvió un remate y venció su propio arco.

El equipo dirigido por Gustavo Costas resistió con orden y oficio durante gran parte del encuentro, ante un Flamengo dominante que tuvo 67% de posesión y 19 tiros al arco. A pesar del dominio brasileño, Racing mostró solidez defensiva y carácter, y ahora apuesta todo a la revancha en Avellaneda, que se jugará el miércoles 29 de octubre a las 21:30 en el Estadio Presidente Perón.

(Fuente: RacingdeAlma)

La Academia se hace fuerte en casa. En lo que va de la Libertadores, ganó todos sus partidos como local, con una media de 2,3 goles por encuentro y una defensa que apenas recibió un tanto. Además, el factor emocional será clave: los hinchas preparan un recibimiento histórico, con mosaicos, bengalas, banderas gigantes y una movilización masiva que promete convertir el Cilindro en una caldera.

Costas confía en el empuje de la gente y en la capacidad de su equipo para revertir la serie. “Jugamos contra uno de los mejores equipos del continente, pero en casa somos otro Racing. Vamos a dejar todo”, declaró tras el partido.

(Fuente: Record)

El ganador del cruce enfrentará en la final al vencedor de la serie entre Liga de Quito y Palmeiras, que también se definirá la próxima semana.

Racing sabe que no hay margen de error. Pero también sabe que en Avellaneda, con su gente y su historia, todo es posible. Y en la Libertadores, los milagros suelen tener camiseta celeste y blanca.